Terminando con la anarquía y el desbarajuste

 

La organización, en la vida de una persona, no se trata de algo importante, ¡es fundamental!

Muchos dicen, y con sobrada razón, que es la base del éxito.

Sucede que quizás seamos muy buenos con los negocios y obtengamos grandes ganancias con la actividad que desempeñemos. Sin embargo, si fallamos en el ordenamiento de las cosas y de las ideas, inclusive, tarde o temprano, la estructura se nos irá a pique.

Los elementos que dejamos fuera del lugar correspondiente, se perderán, y luego nos tomará tiempo y energía volverlos a encontrar. Por eso lo aconsejable, es tener un lugar asignado para cada utensilio o elemento que empleamos con frecuencia. Como ser, las llaves, los artículos del trabajo, las herramientas, etc.

Para saber qué se tiene que hacer y cuándo, es bueno acostumbrarse a usar agendas, calendarios, listas y recordatorios. Todos estos son excelentes “ayuda-memoria”. Mejor aún, si se va tachando de la lista de actividades, las que ya se realizaron. Este paso, también contribuye a despejar la mente, ya que si volcamos todo “al papel”, nos quedará más espacio en el “disco rígido mental” y seguramente andaremos más relajados por la vida.

Combinar actividades similares es sumamente aconsejable. Por ejemplo, realizar la mayoría de las compras en un mismo sector y día, de esta manera se ahorra tiempo y dinero.

Al principio cuesta adquirir la disciplina necesaria para ser ordenados, pero si se insiste y persevera, luego, poco a poco, se convierte en hábito, y este sí, es un hábito que vale la pena adquirir.

Admito que recién me encuentro dando los primeros pasos en este sentido, buscando otorgarle a mi existencia, mayor método y sistema. Les aseguro que cada adelanto es un triunfo y brinda mucha satisfacción. Por otra parte, se darán cuenta que de esta manera les sobrará más tiempo para realizar las actividades recreativas que uno va postergando.

Tener todo en orden, no sólo es algo gratificante, es uno de los mejores secretos que, sirven para obtener prosperidad y mantenerla.